Abstract—- The present investigation had the intention of detecting cases of gender violence, which is knownas physical, sexual, psychological or social damage against a person. In various literatures, it is referred to asany act of violence that causes damage to the health status of women. The prevalence of gender-basedviolence worldwide is high, affecting millions of women, which is why it is currently considered one of the mainpublic health problems. For this study, the Woman Abuse Screening Tool (WAST) questionnaire was carriedout, which allows detecting gender-based violence against women in the domestic environment. The mainresults show that 99 women out of the 223 surveyed have suffered from some type of abuse. violence, wherepsychological and economic violence are the most frequent.Keywords: gender-based violence, violence against women, domestic violence, violence. Diagnóstico situacional de casos de violencia de género ISSN-E: 2697-3650Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)Jessica Lucía Chimborazo Chimborazo https://orcid.org/0000-0002-6840-5130jesica1994chimborazo@gmail.com Universidad Técnica de Ambato, Carrera de Enfermería Ambato-EcuadorResumen—La presente investigación tuvo la intensión de detectar casos de violencia de género, la cual esconocida como un daño físico, sexual, psicológico o social contra una persona. En diversas literaturas se hacereferencia como a todo acto de violencia que ocasione un daño al estado de salud de la mujer. La prevalenciade violencia de género a nivel mundial es alta, afectando a millones de mujeres, por lo que es consideradaactualmente como uno de los principales problemas de salud pública. Para este estudio se realizó elcuestionario Woman Abuse Screening Tool (WAST), el cual permite detectar la violencia de género contra lamujer en el entorno doméstico, los principales resultados muestran que que 99 mujeres de las 223encuestadas, han sufrido de algún tipo de violencia, donde la violencia psicológica y económica son las másfrecuentes. Palabras clave: violencia de género, violencia contra la mujer, violencia doméstica, violencia. Situational diagnosis of cases of gender-based violence38Recibido (06/09/2022), Aceptado(18/10/2022)Moyano Calero Willian Eudrillirhttps://orcid.org/0000-0001-6757-9326 we.moyano@uta.edu.ec Universidad Técnica de Ambato, Carrera de EnfermeríaAmbato-EcuadorChimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género https://doi.org/10.47460/minerva.v3i9.71
I. INTRODUCCIÓN La violencia de género se ha caracterizado a través del tiempo como un problema social en donde ladominación del hombre sobre la mujer ha sido la causa de sufrimiento en innumerables familias y entornossociales, ocasionando daño físico, sexual o psicológico [1]. Otros autores [2] definen la violencia de génerocomo todo acto de agresión, física o psicológica, basado en la superioridad de un sexo sobre otro, a partir deconcepto, se presenta como un problema social producto de conductas de odio y menosprecio en mayorgrado hacia la mujer, aunque no es exclusivo. En la actualidad se han presentado también casos de violenciahacia el género masculino. Sin embargo, en los países en vías de desarrollo aún se usa el contexto deviolencia de género para referirse al daño realizado a una mujer en su entorno biopsicosocial [3]. Esto debidoa que, la violencia contra la mujer se ha incrementado en la última década, siendo omnipresente ydevastadora en algunos casos. En este sentido, las cifras publicadas por la Organización Mundial de la Salud(OMS) en el año 2021, reflejaron que 736 millones de mujeres han sufrido de agresiones físicas y sexuales,siendo la más frecuente la violencia doméstica o ejecutada por su pareja, además, en 161 países, se estimóque tres de cada diez mujeres han sido agredidas física o sexualmente por sus cónyuges [4].Diversos estudios han reportado que las mujeres entre 15 a 49 años, son el grupo etario, en el que existemayor registro de prevalencia de violencia de género con un 38% de femicidios cometidos por losacompañantes. Otras investigaciones [5], muestran que una relación llena de conflictos por finanzas, celos ytransgresión de rol aumenta en 27% la posibilidad de que ocurra un evento de violencia doméstica [5], [6]. Enla actualidad la desigualdad de género y la inequidad de normativa legal contra la mujer son las dosprincipales causas de este problema de salud mundial, pero también es importante destacar la falta depromoción para la autovaloración de la mujer. En este aspecto, se ha observado que los principales factoresde riesgo, asociados a violencia contra la mujer, son un bajo nivel de escolaridad, exposición a maltratoinfantil, escenas de violencia doméstica en su niñez, trastorno de personalidad antisocial, alcoholismo,inequidad de género y desempleo [7]. Algunos estudios han revelado las normas no equitativas de violencia yhan observado que las creencias religiosas y las ideologías masculinas de superioridad en relación con elgénero femenino son los desencadenantes de violencia de género contra la mujer [8]. La violencia contra la mujer genera problemas de salud físicos, mentales, sexuales y familiares, en el caso deque en la relación existan hijos puede verse comprometido en bienestar físico y mental de ellos también [9].De tal manera que, el manejo de los actos de violencia de género es mediante un tratamiento en conjunto deprofesionales de diversas áreas, lo que representa un elevado coste económico para la familia y el estado,otros autores han reportado que puede existir un efecto dominó en la sociedad, debido a que las víctimaspueden verse incapacitadas para trabajar o ser aisladas por la sociedad [10]. Las consecuencias de sufrirviolencia de género pueden ser mortales como el homicidio y el suicidio y además pueden producir lesionesque repercuten en la reproductividad de la mujer. Además, existe el riesgo de mantener embarazos nodeseados que se desencadenan en abortos provocados, muertes fetales y partos prematuros. Además, lasmujeres víctimas de violencia de género aumentan en 1,5 veces, el riesgo de contagio del Virus deinmunodeficiencia humana (VIH) [4], [11]. La salud mental de las víctimas es uno de los campos másafectados, experiencias previas revelan que el 90% de las personas afectadas presenta depresión, ansiedad,trastorno de estrés postraumático, e intentos autolíticos [12], así como aumento en el consumo de drogas,alcohol, sobre todo cuando hay abuso sexual y físico [13]. Debido a la alta tasa de incidencia anual de casos de violencia contra la mujer, se han implementadoestrategias para su prevención, por ejemplo, en el año 2019, la Organización de las Naciones Unidas (ONU),en conjunto con otras doce organizaciones, desarrollaron un marco normativo llamado RESPECT WOMEN,que permite intervenir en diversas estrategias para fortalecer las habilidades de relación, empoderar a lamujer, brindar servicios garantizados, reducir la pobreza, construir entornos saludables, prevenir el abusoinfantil y adolescente y mejorar el cambio de actitudes, creencias y normas sobre la mujer y su papel en elentorno global [14], [15]. 39ISSN-E: 2697-3650Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
Por otro lado, en Ecuador en el año 2019, se realizó la segunda encuesta nacional sobre relaciones familiaresy violencia de género contra las familias (ENVIGMU), aplicada en 20.848 viviendas. En este estudio, se registróque el 32% de mujeres recibieron un acto de violencia física en los últimos doce meses, donde el 4% hasufrido violencia psicológica. Se observó además que la provincia de Tungurahua se encuentra en el séptimolugar de prevalencia de violencia de género en el ámbito laboral y familiar [16]. En este trabajo se ha desarrollado un estudio para conocer de cerca la problemática de la violencia de género,para demostrar así su significancia como problema de salud pública, además de fomentar la prevención yprotección de la mujer. Se tomó en cuenta un enfoque multisectorial, por lo que primordialmente se debeconocer la situación de violencia de género en cada territorio, provincia, ciudad y barrio; por lo tanto, elobjetivo de este estudio es realizar un diagnóstico situacional de casos de violencia de género contra la mujeren el barrio de Atocha, de la cuidad de Ambato, Ecuador. En este sentido, se realizó un estudio con unenfoque cuantitativo, descriptivo, de corte transversal, con muestreo probabilístico aleatorio simple, en dondese utilizó un cuestionario para la recolección de datos y se tabuló en el software SPSS. En este sentido, eldocumento está compuesto por una introducción, desarrollo, metodología, resultados, discusión yconclusiones.II. DESARROLLOLa violencia de género está definida por la por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como todo acto deviolencia que resulte en un daño físico, sexual o psicosocial a las personas sin discriminar su géneromasculino o femenino [12]. También hace referencia a las agresiones que causen daño físico, esto puede sermediante golpes o emplear cualquier tipo de fuerza física hacia el cuerpo de otra persona [17]. Por otro lado,se puede definir como cualquier acto sexual, la tentativa de consumar un acto sexual u otro acto dirigidocontra la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de su relacióncon la víctima en cualquier ámbito [1]. También se conoce como violencia de género aquella causada poraspectos psicológicos, que pueden causar daño a nivel de la autoestima a través de la intimidación, amenazas,humillaciones [17]. Finalmente, es posible afirmar que existe una violencia de género asociada a criterioseconómicos, que consiste en el control total sobre los recursos financieros ya sea impidiendo a la víctima atener dinero y obligando a dar dinero [17].La violencia de género en tiempos de confinamientos se incentivó producto de la necesidad de las personasde permanecer en el mismo ambiente donde está el agresor, además de las dificultades que hubo pararealizar denuncias [18]. En este sentido, la OMS afirma que la violencia contra la mujer es un problema desalud mundial con proporciones epidémicas, tomando en cuenta las cifras de violencia hacia la mujer en unagran cantidad de países en todo el mundo. Además, se ha visto que las desigualdades entre géneros son elprincipal motivo de violencia, siendo dominante el papel del hombre en el hogar, en el trabajo y en la granmayoría de los escenarios sociales.La cultura global en Latinoamérica ha condicionado a que el hombre sea el proveedor y protector de lafamilia, mientras que la mujer ocupa el lugar de cuidado de los niños y atención doméstica de la familia. Estevínculo del papel del hombre y el papel de la mujer hace menos visible la opresión del hombre, su caráctersuperior sobre la mujer y la violencia implícita sobre ella. Este tipo de violencia no es fácilmente detectable porlas víctimas, ya que se sienten provistas de calidad de vida, seguridad y compañía, lo cual les impide observarque han sido relegadas a un segundo plano, donde no pueden compartir el poder sobre las decisionesprincipales del hogar o sobre si mismas para el crecimiento personal [19]. 40ISSN-E: 2697-3650Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
41ISSN-E: 2697-3650La violencia de género ocasiona diversos síntomas en las mujeres afectadas, en principio se han observadoreacciones de estrés post traumático, depresión, ansiedad, dificultad para las actividades cotidianas, pero,además, se ha visto que se desarrollan habilidades para manipular a las personas, para siempre parecervíctimas, de tal manera que puedan tener el control de la situación sobre los demás y evitar posiblessituaciones de violencia. Otro aspecto que han demostrado tener algunas afectadas, es la sexualidad en todaslas situaciones, convirtiéndose en personas seductoras para así sentir que tienen el control sobre los otros.Además, el uso de alcohol, drogas y suspicacia sobre los demás [19].I.Metodología A. Métodos El enfoque de esta investigación es cuantitativo, de alcance descriptivo, de corte transversal. Fue realizado enla población femenina comprendida entre 18 a 65 años de edad, que residan en el barrio de Atocha, de laciudad de Ambato, Ecuador. Para el cálculo del tamaño de la muestra se consideró a una población finita de530 mujeres, con un margen de error de 5% y un nivel de confianza de 95%, se obtiene como muestrarequerida a 223 individuos. Como criterios de inclusión se consideró a mujeres entre 18 a 65 años que decidieron participar en el estudio.Fueron excluidas las mujeres con algún tipo de discapacidad y dificultad para responder el cuestionario,también aquellas definidas como transgénero y aquellas residentes externas del barrio y se eliminaron loscuestionarios incompletos, quedando 218 personas como muestra definitiva, a los cuales se seleccionó conmuestreo probabilístico aleatorio simple. B. Material Para la recolección de datos se utilizó el cuestionario Woman Abuse Screening Tool (WAST), originado enEstados Unidos [20], presenta un alfa Cronbach de 0.91 y es elegido por ser uno de los mejores instrumentospara valorar violencia de género contra la mujer en el entorno doméstico acorde a la guía inglesa. Elinstrumento consta de dos secciones: la primera de variables sociodemográficas y la segunda es elcuestionario Wast con 8 preguntas cerradas tipo Likert. Cada pregunta tiene tres opciones de respuesta quevan desde mayor a menor gravedad, dándole una puntuación de 3 a 1. El puntaje mínimo es de 8 puntos sinviolencia a un máximo de 24 puntos la mayor violencia, considerando un puntaje total igual o mayor a 15puntos en donde refleja que hay presencia de violencia. Los datos proporcionados por los encuestados fueron procesados y analizados con software específico. Todala información recolectada fue anónima y utilizada de manera confidencial, se respetaron sus principios debeneficencia, autonomía y justicia. Se solicitó la firma de consentimiento informado para la participación en elestudio, se respetaron las respuestas y opiniones de las personas, no se indujo o sugirieron respuestas. IV. RESULTADOSSe incluyeron 218 personas, de 18 a 65 años, de los cuales el 34,86% corresponde al grupo entre los 41 a 50años. Además, se observó que el 37,61% de la población son personas casadas, y el 80,73% de la poblacióntiene hijos, mientras tanto el 39,91% percibe un ingreso económico entre 200 a 400 dólares. Por otro lado, seobservó que de 85 mujeres el 38,99% tienen educación superior y el 55,96% son trabajadores dependientes(Tabla 1). Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
42ISSN-E: 2697-3650Tabla 1. Distribución sociodemográfica de la población de género femenino del barrio Atocha.Por otro lado, se pudo constatar que los ingresos económicos no son elevados, representando un valorsignificativo para poder cubrir apenas con algunas necesidades básicas (Tabla 2). Además, se pudo evidenciarque los trabajos no son formales en su mayoría, no representan empleos que devengan grandes beneficiospara las personas encuestadas. Tabla 2. Datos sociodemográficos relacionados con la situación económica.Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
Del total de la muestra de 218 personas, el 42,46% equivale a 93 personas que refieren haber sufrido algúntipo de maltrato por parte de las personas cercanas y de importancia para ella, y 125 personas manifiestan nohaber vivido estos maltratos. De esta población, el rango de edad comprendido entre los 41 a 50 años,indican la mayor prevalencia de haber sufrido algún tipo de violencia con el 47.31%. Las mujeres divorciadaspresentan el 35.48% de violencia de género, mientras que el 76.80% de las mujeres con hijos no hanpresentado violencia de género. Las mujeres con ingresos de USD 200 a USD 400 representa el 44,09% ymanifiestan haber sufrido violencia, se observó que el nivel de educación superior y las personas con trabajodependiente han sido los más propensos a sufrir maltrato de algún tipo con el 29,03% y el 56,99%respectivamente. Las mujeres más jóvenes con edades inferior a los 30 años, en su mayoría manifestaron nohaber sufrido violencia de género, al igual que las mujeres con edades superiores a los 51 años.Lamentablemente la cifra es mayor en mujeres casadas con hijos, lo que repercute en una situación difícilpara los hijos, que además de causar impacto emocional, puede repercutir en personas que también sufranviolencia en el futuro. De acuerdo con el Instrumento Woman Abuse Screening Tool (WAST), el 21,56% respondieron que su relaciónes o era estresante, y el 46,33% resolvían o resuelven sus problemas de una manera algo difícil. El 42,66%expresó que al terminar las discusiones con su pareja muchas veces se sienten o sentían mal consigo misma,mientras que el 18,81% muchas veces sintió miedo de las reacciones de su pareja durante el intercambio depalabras. El 17,89% reporta que estas discusiones muchas veces terminaron en golpes y el 23,85% manifiestaque solo a veces se producen golpes. Respecto asociada al control del dinero o a la realización de trabajoexcesivo, el 35,32% respondió que a veces y el 24, 31% muchas veces. Mientras que el 22,48% registra quemuchas veces reciben insultos o son humilladas o descalificada y el 37,16% solo reporta que esto se hayapresentado a veces. Sin embargo, el 4. 59% respondió que muchas veces se siente o sintió obligada a tenerrelaciones sexuales con su pareja para evitar problemas y el 28,90% reportó que solo a veces.Tomando en cuenta los resultados del cuestionario WAST, se observó que 99 mujeres obtuvieron un WASTmayor o igual a 15 puntos, el cual demuestra la presencia de violencia de género, mientras que 119 mujeresque representa un 54,59% con WAST menor a 15 puntos no ha sufrido ningún tipo de violencia. La violenciacontra la mujer continúa siendo un problema global de salud pública, debido a la alta frecuencia con que sepresenta y por los problemas de salud física, mental y familiar que puede conllevar, por lo que la evaluaciónde este problema debería hacerse periódicamente generando oportunidades de ciclos de mejora para sudecrecimiento [12].CONCLUSIONESSe realizó un diagnóstico situacional sobre casos de violencia de género y se pudo evidenciar que existe unapoblación con moderada prevalencia de violencia, siendo detectada la psicológica y la económica con mayorpresencia en el lugar de estudio, en donde las mujeres con educación superior son las más afectadas, por lotanto, sigue siendo un problema invisible para la comunidad, generando problemas personales, físicos,psicológicos, sociales y familiares para las mujeres víctimas. La violencia de género se ha hecho tan común en algunos sectores, que algunas personas no lograndetectarlo porque ya parece algo normal, lo cual es sumamente preocupante para una sociedad que esperaevolucionar y desarrollarse en un mundo moderno. Por ende, la formación escolar y familiar siguen siendo lasprincipales herramientas para que se atenúe la violencia de género en las nuevas generaciones. Estasenseñanzas deben ir encaminadas a la mejora continua de las relaciones familiares, a crear ambientes mássanos y sociedades más armoniosas.43ISSN-E: 2697-3650Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
La formación en valores sigue siendo una buena alternativa para que los jóvenes y niños creen mejoresespacios sociales, sin embargo, las realidades familiares serán determinantes para que el futuro sea masprometedor en el tema de violencia de género. Es un amplio camino que recorrer para que las nuevassociedades no transmitan la violencia de género y para que la equidad entre géneros esté centrada en lasoportunidades de crecimiento, educación, desarrollo de las personas, para alcanzar metas individuales ycolectivas en una sociedad de respeto.La autovaloración de las mujeres es fundamental para que frenar los impulsos de control de muchoshombres que siguen pretendiendo ambientes hostiles y discriminatorios. De aquí, que las mujeres debanvalorarse lo suficiente para no caer en situaciones pasionales que se caracterizan por tener más amor por elotro que por si mismas, incurriendo en relaciones toxicas y desfavorables para ellas y sus hijos.Por otro lado, la formación adecuada en le género masculino, es vital para que prevalezca el respeto entre suspares, sean estos mujeres u hombres, con equidad y valoración del otro. De esta manera, la formaciónhumana desde la familia y la escuela, forman los ejes fundamentales de sociedades exitosas.REFERENCIAS[1] OPS, «Organización Panamericana de la Salud,» Violencia contra la mujer, 2021. [En línea]. Available:https://www.paho.org/es/temas/violencia-contra-mujer#:~:text=Las%20Naciones%20Unidas%20definen%20la,producen%20en%20la%20vida%20p%C3%BAblica . [Último acceso: 13 abril 2022].[2] J. Araujo., «"La violencia contra las personas sexo-género diverso su tratamiento en el sistema jurídicovenezolano",» Telos, vol. 20, 1, pp. 129 -158, 2018. [3] F. Poggi., «Sobre el concepto de violencia de género y su relevancia para el derecho.,» Universidad deAlicante, vol. 1, 42, pp. 293-297, 2019. [4] OMS., «Estimaciones mundiales y regionales de la violencia contra la mujer: prevalencia y efectos de laviolencia conyugal y de la violencia sexual no conyugal en la salud.,» 2013. [En línea]. Available:https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/85243/WHO_RHR_HRP_13.06_spa.pdf;jsessionid=A408059350A758B43696A2DF7CC30C74?sequence=1. [Último acceso: 03 junio 2022].[5] R. Jewkes., «"Intimate partner violence: causes and prevention",» The Lancet, vol. 359, 9315, 2002. [6] L. Sardinha., «"Global, regional, and national prevalence estimates of physical or sexual, or both, intimatepartner violence against women in 2018",» The Lancet, vol. 399, 10327, pp. 803-813, 2022. [7] P. Napoli, «"Jóvenes, activismos feministas y violencia de género en la Unam: genealogía de un conflicto",»UNAM, vol. 2, 19, pp. 1-27, 2021. [8] S. Fine, J. Kane y S. Murray, «"The Role of Violence Acceptance and Inequitable Gender Norms in IntimatePartner Violence Severity Among Couples in Zambia",» Journal of Interpersonal Violence, vol. 36, 19, pp. 19-20, 2019. [9] C. Roza, «Violencia sexual y basada en género: mapa de ruta para su prevencion y atencion en americaLatina y el Caribe,» 2021. [En línea]. Available:https://publications.iadb.org/publications/spanish/document/Violencia-sexual-y-basada-en-genero-mapa-de-ruta-para-su-prevencion-y-atencion-en-America-Latina-y-el-Caribe.pdf. [Último acceso: 25 mayo 2022].[10] M. Johnson, «"Conflict and Control: Gender Symmetry and Asymmetry in Domestic Violence",» ViolenceAgainst Women, vol. 12, 11, p. 18, 01 Noviembre 2006. [11] J. Ramírez, R. Alarcón y S. Ortega, «"Violencia de género en Latinoamérica: Estrategias para su prevencióny erradicación",» Universidad de Zulia, vol. XXVI, 4, pp. 260-265, 2020. [12] OMS, «Organización Mundial de la Salud. Violencia contra la mujer,» 08 marzo 2021. [En línea]. Available:https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/violence-against-women. [Último acceso: 30 mayo2022].44ISSN-E: 2697-3650Chimborazo & Moyano.Diagnóstico situacional de casos de violencia de género Minerva Journalvol.3, Issue. 9, (pp. 38-45)
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